BOGOTÁ (COLOMBIA). Jueves 19 de Septiembre de 2024. El reciente anuncio del presidente Gustavo Petro sobre el posible cierre de los diálogos de paz con el Ejército de Liberación Nacional (ELN) ha desatado una nueva polémica en Colombia. Este anuncio vino tras un atentado terrorista en Arauca, que generó gran preocupación en el país. En respuesta, Antonio García, líder del ELN, aseguró que el proceso de paz no está roto, aunque se mantiene la tensión por las acciones militares en curso.
La respuesta de Antonio García
Antonio García, el comandante más visible del ELN, utilizó sus redes sociales para aclarar la posición de la guerrilla. A través de un mensaje en X, García afirmó: “El ELN ha sido objeto de operaciones militares, pero no hemos dicho que el proceso de paz esté roto”. Este pronunciamiento busca desmarcar a la organización insurgente de las declaraciones que sugieren un rompimiento total de las negociaciones.
García subrayó que los diálogos de paz pueden continuar, aun cuando existan operaciones militares en su contra. “Diferentes gobiernos lo han hecho en el pasado, y ahora no debería ser la excepción”, explicó el líder del ELN, haciendo referencia a otras negociaciones previas donde se mantuvieron las conversaciones pese a la confrontación armada.
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📍Hoy en Puerto Jordán, #Arauca, 16 militares resultaron heridos en un brutal atentado terrorista.
😡La #PazTotal que Petro prometió solo ha traído muerte y sufrimiento🔥💥
🇨🇴 ¿Crees que Petro está entregando el país a los terroristas?👇🏻 pic.twitter.com/h2oH15aB8v
— Josué 𝕏 (@Joshua_Arte) September 17, 2024
Impacto de las operaciones militares
Las operaciones militares han sido un factor que dificulta la continuidad de los diálogos de paz. Aunque el gobierno ha dejado clara su intención de buscar una salida negociada al conflicto, las acciones contra el ELN han generado tensiones. Estos ataques han despertado escepticismo en algunos sectores sobre la viabilidad de una negociación exitosa.
Sin embargo, el mensaje de Antonio García refleja la voluntad del ELN de mantener las conversaciones. Esto sugiere que, a pesar de las dificultades actuales, el grupo guerrillero no cierra la puerta a una posible solución dialogada. Para muchos, esta postura podría ser clave para mantener viva la esperanza de una paz negociada.
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Consecuencias para el proceso: cierre de los diálogos de paz
Si bien el presidente Petro ha expresado su descontento con las acciones del ELN, la posibilidad de retomar los diálogos sigue abierta. El cierre definitivo de las negociaciones representaría un duro golpe para los esfuerzos de paz en Colombia, que han tenido varios altibajos a lo largo de los años.
El futuro del proceso dependerá en gran medida de las decisiones que tomen ambas partes en las próximas semanas. La esperanza de una solución pacífica, aunque frágil, aún persiste. Para muchos, el diálogo sigue siendo la mejor alternativa para poner fin a un conflicto que ha marcado al país durante décadas.