
BOGOTÁ (COLOMBIA). Lunes 21 de octubre de 2024. Las disidencias del Estado Mayor Central, bajo el mando de ‘Iván Mordisco’, han comenzado a censar a los campesinos en el Guaviare. Este proceso busca establecer una “reforma agraria a su medida” en una región donde el Estado no ha avanzado. Aunque el Departamento Nacional de Planeación (DNP) presentó una estrategia territorial en septiembre de 2024, los resultados aún no se ven.
Estrategia del Gobierno y su Ineficiencia
El 4 de septiembre, el DNP lanzó la estrategia llamada Cooperación Técnica Territorial. Esta iniciativa tiene como meta mejorar la administración del territorio a través de tres pilares: diálogo social participativo, fortalecimiento de capacidades territoriales y creación de un nodo para la administración del territorio. Sin embargo, después de más de un mes, no se han logrado avances significativos.
El Censo de las Disidencias: Consolidar su Propia Reforma Agraria
Mientras el Gobierno no avanza, las disidencias están midiendo los terrenos de los campesinos. Según testimonios, durante la Semana Santa, obligaron a los pobladores a llenar formularios y medir sus tierras. Un documento del Bloque Jorge Suárez Briceño menciona que realizan una “reforma agraria revolucionaria” para tomar control de terrenos ociosos en áreas bajo su influencia.
Impacto en la Comunidad para Consolidar su Propia Reforma Agraria
Los campesinos recuerdan que este tipo de censos ya ocurrió en 2018, cuando ofrecieron lotes del Parque Natural Tinigua a cambio de pagos extorsivos. En esta ocasión, las disidencias han logrado recaudar una “contribución solidaria”, acumulando cerca de 21.000 millones de pesos en la región. Además, han exigido que los propietarios de tierras deben repartirlas entre quienes no tienen.
Conclusión
El control que ejercen las disidencias en el Guaviare resalta la ineficacia del Estado para establecer una presencia sólida en la región. A medida que las disidencias avanzan en sus planes, la situación para los campesinos se vuelve más precaria, generando un clima de incertidumbre y temor. Por lo tanto, la necesidad de una respuesta efectiva por parte del Gobierno se vuelve urgente para restaurar la confianza en la comunidad.