Alias “El Cura” y “Care Loco” están sindicados de planear el secuestro y muerte de un familiar y su acompañante, al parecer, para quedarse con una herencia.
Villavicencio (Meta), 9 de julio de 2014. El Gaula de la Policía Nacional desarticuló en Meta la banda de “Los Caínes” y esclareció el secuestro y asesinato de una reconocida ganadera de la región y su compañero sentimental, hechos en los cuales estuvieron involucrados familiares de las víctimas.
En la operación capturaron 7 integrantes de la organización criminal que a pesar de haber asesinado a sangre fría a los plagiados, continuaban exigiendo dinero por su liberación.
De acuerdo con la investigación del grupo Gaula el secuestro se produjo a finales de febrero del presente año cuando la empresaria fue citada en una finca de Vista Hermosa (Meta) y al llegar al lugar fue amordazada junto a su acompañante, los cuales fueron asesinados y enterrados en un lote cercano.
Los delincuentes tomaron las tarjetas de crédito de las víctimas y en varias sucursales bancarias retiraron más de 7 millones de pesos, hasta que los familiares se percataron de las transacciones y bloquearon las cuentas.
Posteriormente, haciéndose pasar como guerrilleros del frente 27 de las FARC hicieron varias llamadas extorsivas a una de las hijas de la comerciante, en las que nunca especificaron la suma a pagar por la supuesta liberación.
En un exhaustivo trabajo de inteligencia, los investigadores identificaron a los responsables de la desaparición, y los capturaron en operativos simultáneos realizados en los municipios de Vista Hermosa y Granada (Meta), y Villa Nueva (Casanare).
Como líderes de la banda aparecen alias “El Cura” y “Care Loco”, hermano e hijastro de la comerciante.
Están sindicados de planear el secuestro y muerte de su familiar, al parecer, para quedarse con una herencia y evitar que la mujer la siguiera compartiendo con su compañero sentimental.
El hermano de la comerciante, alias “el cura”, habría realizado las exigencias de dinero a su propia sobrina, por una liberación que nunca llegaría. Mientras el hijastro, alias “care loco”, al parecer coordinó con su novia y otros 4 delincuentes, los retiros en cajeros automáticos y la venta de la camioneta en la que se movilizaban las víctimas el día del plagio.