El nuevo líder de Hezbollah, Naim Qassem, afirmó que el grupo puede prolongar la guerra contra Israel. Sin embargo, no descartó la posibilidad de negociaciones. En su primer discurso tras asumir el cargo, Qassem indicó que la resistencia puede continuar durante meses. Está abierto a un alto el fuego “con condiciones”.
Llamado a las tropas israelíes
La situación en el Líbano es tensa tras la muerte de Hassan Nasrallah, ex líder de Hezbollah. Qassem instó a las tropas israelíes a abandonar el Líbano. Advirtió que su permanencia resultará en más derrotas. “Salgan de nuestra tierra para reducir sus pérdidas”, enfatizó.
Diplomacia en medio del conflicto
En medio de intensos esfuerzos diplomáticos entre Estados Unidos, Israel y Líbano, Qassem también mencionó su disposición a mantener negociaciones “indirectas”. Estas son clave para alcanzar una tregua. La posibilidad de un acuerdo es crucial para poner fin a más de un año de conflicto. Este ha dejado miles de muertos y desplazados.
El papel de Nabih Berri en las negociaciones
Qassem destacó la importancia de Nabih Berri, líder del Parlamento libanés, en las mediaciones. Subrayó que la comunidad internacional tiene un papel vital en buscar soluciones duraderas. Su enfoque sugiere un cambio potencial en la dinámica de Hezbollah. El grupo ha estado en contra de cualquier diálogo con Israel.
Desafíos para el nuevo liderazgo
Con su nombramiento, Qassem enfrenta el desafío de mantener la cohesión interna en Hezbollah. También debe gestionar las expectativas de sus seguidores. Estos han estado en la resistencia durante décadas. Aunque el grupo está dispuesto a luchar, también busca una salida que evite más sufrimiento para el pueblo libanés.