BOGOTÁ (COLOMBIA). Jueves 24 de Octubre de 2024. La conmoción en Candelaria, Valle del Cauca, por la desaparición y posterior asesinato de la niña Sofía Delgado ha puesto de manifiesto la necesidad de abordar la seguridad infantil en la región. Lady Carpio, profesora de Sofía, compartió detalles sobre los últimos días de la menor, enfatizando que “nunca estaba sola”. Este dato revela la fuerte relación que la niña tenía con su madre y el entorno familiar que la rodeaba.
Profesora de Sofía Delgado
Desde enero de este año, Carpio ha sido la educadora de Sofía, quien se destacó por su dedicación y rendimiento académico. La profesora comentó que la niña siempre se esforzaba por obtener buenos resultados, un aspecto que ahora resuena con mayor tristeza tras su trágica desaparición. “Ella siempre estaba al tanto de que su grupo produjera buenos resultados”, aseguró Carpio, lo que muestra el compromiso de Sofía hacia su educación y sus compañeros.
Alerta en la Comunidad
Lady Carpio Profesora de Sofía Delgado no solo compartió su experiencia personal, sino que también alertó sobre otros posibles peligros en la región. Mencionó que han identificado a personas que intentan acercarse a los niños con intenciones dañinas. “Los padres han notado a personajes que trataban de incitar a tomar acciones indebidas”, expresó, haciendo un llamado a la vigilancia y al apoyo comunitario. Este comentario subraya la urgencia de crear un entorno más seguro para los menores de edad en el municipio.
Necesidad de Apoyo Psicológico
Profesora de Sofía Delgado hizo hincapié en la importancia del acompañamiento psicológico para los compañeros de Sofía, quienes están lidiando con el dolor de su pérdida. “Necesitan un espacio para expresar su dolor”, afirmó. Este llamado es crucial para el bienestar emocional de los niños, quienes enfrentan una situación devastadora.
El caso de Sofía Delgado ha dejado una herida profunda en la comunidad y plantea interrogantes sobre la protección infantil. La experiencia de la profesora Carpio puede servir como un catalizador para la acción y la reflexión, enfatizando que la seguridad de los niños es una responsabilidad compartida.