BOGOTÁ (COLOMBIA). Martes 12 de noviembre de 2024. Bogotá ha experimentado en los últimos meses una disminución en el nivel de los embalses que abastecen a la ciudad, debido en gran parte al fenómeno de El Niño. Este evento climático aumenta las temperaturas y reduce las precipitaciones, afectando considerablemente el nivel de agua disponible en los embalses de Cundinamarca.
Ante esta situación, la administración local, liderada por el alcalde Carlos Fernando Galán, se vio obligada a reactivar el racionamiento de agua para garantizar el abastecimiento de la capital.
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— Alcaldía de Bogotá (@Bogota) November 12, 2024
Impacto de las lluvias en los embalses
La llegada de la temporada de lluvias ha sido un factor crucial para la recuperación de los embalses en Cundinamarca. Pese a la aparente contradicción de que mientras llueve, se siga racionando el agua, esta medida sigue siendo necesaria hasta que los embalses alcancen niveles óptimos y sostenibles.
Las recientes precipitaciones han generado una tendencia ascendente en el nivel de agua, especialmente en el sistema Chingaza, que es el principal abastecedor de Bogotá.
Reporte de la CAR sobre el nivel de embalses
Según el último informe de la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR), los embalses muestran una mejora en sus niveles, reflejando una tendencia de recuperación.
El sistema hídrico integral de la región calcula los niveles de los embalses comparando el volumen total almacenado con la capacidad total. Estos datos han sido optimistas, lo cual da un respiro a los ciudadanos y al sistema de abastecimiento.
Importancia de los embalses para Bogotá
El sistema Chingaza y otros embalses de Cundinamarca son vitales para el suministro de agua de Bogotá. La recuperación de sus niveles no solo asegura un suministro continuo, sino que también reduce el riesgo de racionamiento futuro.
La administración espera que, si las lluvias continúan, el abastecimiento se estabilice, permitiendo a Bogotá depender menos de medidas restrictivas.
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Perspectivas de abastecimiento en el futuro cercano
Con el inicio de la temporada de lluvias, las expectativas de recuperación de los embalses en Cundinamarca son optimistas.
Si bien el racionamiento aún sigue en efecto, el panorama es alentador, y se espera que la combinación de lluvias y una gestión eficaz de los recursos hídricos permita mantener niveles sostenibles de agua en la ciudad.
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